Es un restaurante típico a la vieja usanza. Porciones grandes. Nada de sofisticación. Con detalles de mercadeo únicos: los bananos cuelgan de una cuerda y se pueden comer gratis. Preparan una bebida muy colombiana limonada con panela. También es gratis. Sirven unas porciones pequeñas de consomé y de frijoles. También gratis.